El itinerario del Camino de Santiago conocido como Camino de Invierno es una variante del Camino Francés que se extiende al sur del mismo entre Ponferrada y Santiago de Compostela. Se trata por tanto de un tramo alternativo que, gracias a su geografía menos montañosa y a sus condiciones climatológicas más suaves, durante siglos permitió continuar el Camino a Compostela durante el invierno, cuando los pasos por a través de los montes de León y Lugo en el Camino Francés estaban cerrados. Debe pues su nombre a que nació y fue particularmente transitado durante el invierno, cuando el ascenso y posterior descenso a lugares como O Cebreiro impedían el paso de los peregrinos.
Junto al clima y la geografía, la historia tiene un papel importante en la génesis y establecimiento de este itinerario, ya que las condiciones climatológicas han variado históricamente, haciendo que en algunos períodos más que una variante el Camino de Invierno fuese una necesidad. Sabemos que este fue el caso del siglo XVIII, siglo en el que se produjo un fenómeno de enfriamiento al que los científicos se refieren como pequeña glaciación, provocando temperaturas tan bajas que algunas áreas atravesadas por el Camino Francés se volvieron particularmente intransitables. Conservamos un testimonio de excepción de uno de los peregrinos que recorrieron el Camino de Invierno en tiempos de la pequeña glaciación: el italiano Buenafede Vanti.
La peregrinación de Gian Lorenzo Buonafede Vanti tuvo lugar en 1717, un Año Santo o de jubileo compostelano en el que peregrinos de toda Europa caminaron a la tumba del apóstol Santiago. Nuestro italiano se puso en camino desde el convento de Castel San Pietro, cerca de Bolonia, y, a lo largo de su Camino, escribió doce cartas muy extensas y ricas en información sobre su peregrinación, cartas estudiadas y editadas hace pocos años por Guido Tamburlini.
Buonafede Vanti llegó a Santiago desde Lisboa a través del Camino Portugués, visitando después los santuarios marianos de Finisterre y Muxía para ver el poniente europeo y, como tantos peregrinos a lo largo de los siglos, tomó finalmente el Camino Francés como itinerario de regreso. Sin embargo, en su tramo gallego, nuestro peregrino no caminó a través de Arzúa, Melide, Palas de Rei y los lugares que conocemos bien a partir del Códice Calixtino, entre Santiago y Ponferrada optó por seguir vía alternativa del Camino de Invierno al que Buonafede Vanti se refiere simplemente como “”il Cammino dritto di San Giacomo”, el camino directo de Santiago, nombre genérico con el que los italianos se refirieron durante siglos al itinerario principal a Compostela.
Actualmente el Camino de Invierno ha sido recuperado como una propuesta singular, con parajes naturales de extraordinaria belleza, como las célebres Médulas o la Ribeira Sacra, y una gran riqueza patrimonial que comprende numerosos monasterios y algunos conjuntos monumentales como Monforte de Lemos. A estos atractivos se suman la gastronomía y el vino, particularmente el vino es parte fundamental de la cultura y el territorio del Camino de Invierno, un Camino que literalmente transcurre entre viñedos de hasta cinco denominaciones de origen diferentes.
Junto a su carácter histórico y riqueza natural y patrimonial, no podemos olvidar otro aspecto que, sin duda, está contribuyendo al reciente éxito del Camino de Invierno: la escasa masificación de este itinerario que permite al peregrino vivir una experiencia de mayor soledad y disfrutar del silencio de los grandes espacios abiertos y el recogimiento de los monasterios medievales.
El reverso de todas las ventajas descritas lo encontramos en la ausencia de una red de albergues tan densa o con la disponibilidad de otros itinerarios. Sin embargo, cada vez existe una mayor oferta de albergues en el Camino de Invierno y creemos que, con el apoyo de Internet y los numerosos enlaces e informaciones que instituciones, foros de peregrinos y asociaciones como Camiños a Santiago pola Ribeira Sacra o Amigos do Camiño por Valdeorras, el peregrino no tendrá problemas para completar su recorrido.
Foto: Hemos tomado esta imagen del proyecto Commons Wikipedia, su autor es Paulusburg.